Los quilates han sido desde siempre un tipo de medida a tener muy en cuenta en cualquier compra venta de oro. Sea cual sea la pieza que quieras comprar o vender, es muy importante que sepas la cantidad de quilates que posee para determinar mejor su valor. Pero, ¿qué son los quilates de oro y de qué nos informan?
El oro continúa siendo uno de los metales más preciados y empleados en todo el mundo. A este respecto, a la hora de hablar de quilates siempre hay que referirse a los quilates de orfebrería. Una pieza de oro puede disponer de una serie de quilates diferentes en función de la aleación o mezcla con otros metales.
Desde la antigüedad, el valor del oro ha estado relacionado con su pureza. Los quilates, por tanto, son el término que se utiliza en joyería para describir la pureza de los metales preciosos. Pero, al mismo tiempo, es también la unidad de masa con la que se indica el peso de gemas y perlas.
El término quilate procede de la palabra griega “keration”, que significa algarroba. Curiosamente, las semillas de este fruto se empleaban en la antigüedad para pesar piedras preciosas, ya que entre ambas existía una clara igualdad de peso. Con el paso del tiempo, el keration griego dio paso a nuestro quilate actual.
Veamos, a continuación, las diferentes medidas en quilates de las piezas de joyería que debes tener en cuenta en cualquier transacción de compra venta de oro.
Partiendo de la base de que el oro puro tiene 24 quilates, el oro de 10 quilates posee una proporción de 10/24 (10 partes de oro puro y 14 partes de otro metal). Quiere esto decir que, cualquier pieza de joyería de 10 quilates, cuenta con un porcentaje de oro del 41%. El resto corresponde a otros metales, de ahí que al vender oro se suele decir que estas piezas son las más resistentes gracias a su mayor aleación con otros metales.
Siguiendo con la proporción anterior, cualquier pieza de oro de 14 quilates posee un 58,5% de oro puro. Tanto las piezas de 10 como de 14 quilates adquieren un color un tanto cobrizo con el paso del tiempo, por lo que, a pesar de su resistencia, requieren de un mayor mantenimiento. Este es un aspecto muy importante que deberás tener muy en cuenta en cualquier transacción de compra venta de oro.
De hecho, las piezas de oro de 14 o 10 quilates se pueden oxidar más fácilmente debido a que su porcentaje de oro puro es menor. En cambio, al ser más duro gracias a la aleación con un mayor número de metales, no se raya tan fácilmente como las piezas de 18 o 24 quilates.
El oro de 18 quilates se conoce también como oro de primera ley o 750 (este número hace alusión a la cantidad de oro puro que se emplea en la elaboración de la pieza, 750 milésimas de oro). En este caso, el porcentaje de oro puro que se utiliza es del 75%, mientras que el 25% restante corresponde a otros metales.
Al haber un mayor porcentaje de oro puro, el brillo de estas piezas de joyería es más estético. De hecho, el oro de 18 quilates es el más comercial, ya que no se oxida y se mantiene muy bien con el tiempo.
Las piezas de oro de 22 quilates poseen 22 partes de oro fino u oro puro y 2 partes de aleación con otros metales. Por tanto, poseen una pureza del 92%, lo que hace que su brillo también sea mucho más intenso que las piezas de 10 y 14 quilates. Además, al tener una mayor proporción de oro puro, no se oxida, aunque sí es necesario tener en cuenta que pueden rayarse con más facilidad.
Por último, hay que hablar del oro puro al 99,9%, el oro de 24 quilates. No hay ninguna pieza de joyería compuesta por oro de 24 quilates, ya que se trataría de una pieza muy blanda. Tan solo se da en lingotes u otros objetos sin uso diario. Ten en cuenta que el oro apenas tiene un grado de resistencia en la escala Mohs de 2,5. Un anillo o un collar de 24 quilates se rayaría o se dañaría con mucha facilidad.
Como ya venimos comentando, los quilates indican el grado de pureza de una pieza de oro. El oro puro sin mezclar es el que posee 24 quilates. No existe en él ningún tipo de aleación o mezcla con otros metales, por lo que se trata de un oro blando y maleable. A partir de aquí, al comprar oro puedes encontrar piezas que posean 22, 18, 14, 10 y hasta 8 quilates.
Estas cantidades lo que indican, pues, es el porcentaje de pureza del oro y la cantidad de metales con los que se ha mezclado este para elaborar la pieza. En joyería, lo más habitual es trabajar con piezas de 18 quilates que cuentan con un porcentaje de un 75% de oro puro. Un grado de pureza que ofrece una mayor resistencia al desgaste y su precio es más económico.
Saber cuántos quilates tiene el oro es fundamental en cualquier operación de compra venta de oro. Para ello, los quilates están señalados o sellados en la propia pieza. Durante el proceso de fabricación, el joyero marca con un número seguido de la letra K para indicar el número de quilates que tiene.
Este número suele aparecer en el broche de las pulseras y collares, en el interior de los anillos o en el gancho de los pendientes. No obstante, si lo deseas también existen kits especiales para determinar la pureza de una pieza de oro, como los que utilizamos en las compra venta de oro.
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